Hoy no hay esquí, sólo viaje.
Madrugón a las 6 para preparar todo y salir a las 7 a por Nando. Llegamos bien al aeropuerto para comprobar que llevamos 19 kilos de más: 26kg mi maleta de esquís, 24kg la de Nando, y la maleta de comida casi 30kg (habíamos pagado extra sólo 23kg!). A 15€ el kilo extra, 285€ de equipaje extra… empezamos bien el viaje.

Menos mal que topamos con Jessica en el mostrador, que se centra en soluciones, no en problemas y nos ayuda a darle forma a esa locura. Acabamos pagando una maleta vacía que no puede pesar más de 4kg, la mía de mano que le saco las botas y las meto en la bolsa de esquí (ya pesada, pirula cortesía de Jessica) y al final por 60€ de más se resuelve todo.
El viaje bien todo, y el trayecto hasta la casa en coche de alquiler también.

Vamos bordeando la ribera del lago Leman rodeado de picos nevados y no paramos de echar fotos movidas a través del cristal del coche. Finalmente llegamos al valle principal donde está Vouvry y de ahí subimos a la montaña donde está Miex, el pequeño pueblecito donde está la casa. Un espectáculo de vistas.



Planteamos el día siguiente. Decidimos ir a Châtel, que nos pilla a 40mins y es parte del dominio de Portes du Soleil que es como un conglomerado de 12 estaciones entre francesas y suizas, algunas conectadas y otras no. Hay que estudiar muy bien los planos para saber que estaciones conectan con cuáles, qué se puede hacer y qué no. El tema orientación y moverse por estaciones ya se intuye complejo.
